Literalmente.
Hay días en que el despertador no debería sonar. En que no debería llamarte tu mamá para preguntarte algo que no podías responder. En que no debería sonar el intercomunicador y menos si cuando sonámbulo te levantaste, resultó que era "nadie".
Hay días en que después de un evento de 360 personas...no te puedes levantar.
Por eso todo lo que íbamos a publicar hoy, a bajar hoy, a subir hoy, a investigar hoy y a navegar hoy, LO VAMOS A DEJAR PARA MAÑANA.
(gloriosa excepción -el trabajo es un vicio-: te regalamos este link)
www.youtube.com/watch?v=E52dD9GQv7M